El cine francés es un mundo en si mismo. Una cinematografía que siempre se ha mantenido de una manera premeditada como un antagonista al gran hermano americano. Esta idea es la que me permitió trabajar una versión de cartel de una manera mas de cine independiente. Es decir, utilizando elementos de la historia para representarla y no a los protagonistas de la misma, representando el QUE sin hacer alusión al QUIEN. Para ello, y como hacía el cartel original francés, trabajé una composición tipográfica a la que le incorporé el elemento de las cosas vistas a través de una pantalla, puesto que las grabaciones en video constituyen un elemento muy importante de la trama.

También se realizó un segundo cartel, ya que cuando tienes a Juliette Binoche en el reparto…